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Sobre el Año nuevo.

Este no es un año nuevo más, no es un año nuevo de morondanga dentro de una nueva década. Es un año nuevo diferente, redondito (amamos los números redondos!), es el año del bicentenario, empieza una nueva década y NO es un año electoral.
Queremos dejar en claro que ambos somos de los que festejamos el comienzo del milenio en el 2000, y no como los otros racionalistas insoportables que esperaron hasta el 2001 para entrar en el S XXI.
Sin embargo, es un comienzo de década que nos encuentra en plena transición: lejos del acné adolescente, pero bastante lejos todavía de asumirnos adultos. No es el comienzo de una era en sí misma, digamos. Pero algo es algo.
¿Será verdad que nos quedan sólo 2 años más de vida como dice la película (o las predicciones malinterpretadas mayas)?. ¡Qué miedo! Por las dudas hay que ponerse las pilas y empezar a cumplir todas esas ideas raras que surgen cuando uno cree que se viene el apocalipsis, esto incluye volvernos verdes (tener conciencia ambiental), no dejar tanto para mañana, seguir la premisa de Mostaza e ir paso a paso, mantener todo lo posible la tranquilidad y no dejarnos arrastrar por la masa. No tanto go with the flow (?).
Bueno muchachos, pilas, sigannos que no los vamos a defraudar.